miércoles, 6 de octubre de 2010

Una Estrella en el Firmamento

Siendo veo a Dios
Teniendo, sólo negrura.
Si soy, tengo
Si tengo, nada más poseo.

Dulce María, enséñanos tu humildad,
Puro Señor, enséñanos tu yugo y tu carga,
pues tantos son los ojos q. con FE
nos lanzamos al abismo del Misterio.
Q. al encontrarte alegre, sonreimos.

Jesús, posees un humor fino y elegante,
la bondad y misericordia que esperamos
Y a los q. como niños te miramos: un recuerdo
la Sagrada Comunión

Jesús, te rezo cada día
voy a visitarte siempre que puedo,
(a veces sin gana)
pero eres como una fuente que mana Amor...
Es como un juego:
TU me Amas, y yo te amo y en la misma medida amo al prójimo
Asi se conforma el mágico triángulo.

La mejor medicina para el alma, la mente y el cuerpo es orar. SUSANA

1 comentario:

carmen dijo...

Susan el poema es bello y firme en convicciones religiosas pero echo de menos la alegría que siempre tiene Jesús. Y tú también eres alegre. Besos.